jueves, 31 de julio de 2008

LAS TRES LUCES


Hace ya unos cuantos años cuando era niño vi en un programa infantil una escena que me marcó profundamente. En dicha escena dos hombres entran en una sala llena de velas, el misterioso acompañante le dice que cada vela corresponde a una vida. Le pregunta, curioso él, cual es su vela; el acompañante le enseña una pobre vela consumida y le dice mirándole fijamente a la cara que corresponde a su vida y que le queda muy poco para apagarse.
Esta magnífica escena estaba copiada de una gran película de Fritz Lang de título "Las tres luces" (Der Müde Tod).
El film data del año 1921 el mismo que la magnífica "La carreta fantasma" a la que le unen ciertos paralelismos. En la película de Lang aparece la Muerte en un personaje oscuro y siniestro de la mano del gran actor Bernard Goetzke, inspirador de bien seguro, a Ingmar Bergman para su personaje de la muerte en "El séptimo sello".
La película "Las tres luces" empieza cuando en un cruce de caminos la Muerte detiene a una carreta o mejor dicho una diligencia en la cual viaja una joven pareja de enamorados. Todos los viajeros hacen parada y fonda en un apacible y bonita aldea. Antes de la llegada a la población el inquietante personaje compró al lado del cementerio un terreno para hacer un "jardín" y en el cual levantó un muro insuperable en altura y sin puerta alguna para sorpresa e inquietud de los pobres habitantes de la aldea.
En un momento de la película la Muerte dentro de su jardín mortuorio le dice a la joven enamorada:

"Aquí ves las vidas de los hombres, se encienden y arden durante un tiempo, y se apagan cuando Dios lo decide."

Le propone un trato para recuperar la vida de su amado y consiste en salvar al menos la llama (vida) de una de las tres velas terminales. Cada vela corresponde a un capítulo de la película que transcurren a modo de aventura en una ciudad árabe, en Venecia y en una población China, respectivamente. Para finalizar en una coda de lo más impresionante del cine alemán expresionista de los años veinte.
Como colofón les dejo con la impresión suscitada al mejor director de cine español y plasmada en su libro "Mi último suspiro" sobre esta obra de arte llamada "Las tres luces" también conocida como "La muerte cansada":

"Fue al ver Der müde Tod cuando comprendí sin la menor duda que yo quería hacer cine. No me interesaron las tres historias en sí, sino el episodio central, la llegada del hombre del sombrero negro - En seguida supe que se trataba de la Muerte- a un pueblo flamenco, y la escena del cementerio. Algo que había en aquella película me conmovió profundamente, iluminando mi vida."
(Página 100, capítulo Hacer cine)

4 comentarios:

Feingeschliffen dijo...

¡Vaya! Yo también vi la película (o parte) cuando era pequeño y también quedé muy afectado. Tan afectado, que hasta hoy no la había vuelto a recordar. Quedé aterrorizado, ahora me acuerdo. Supongo que ahora estaría preparado para volverla a ver.

Tu blog sigue siendo el mejor.

Unknown dijo...

bien, ahora entiendo muchas cosas de vosotros, jejeje, con esa infancia... jajajajaja

Jove Kovic dijo...

No he visto la película, pero el libro es magnífico. Saludos.

Anónimo dijo...

Yo también vi el programa en la tele cuando era niño. Y la verdad es que me gustaba mucho, pero con el tiempo ya no recuerdo su nombre. Si alguien lo recuerda le agradecería que nos lo dijera a todos. La película no la he visto, pero leyendo la reseña k haces esta claro que la veré.